La lección no aprendida: Del Holocausto al Genocidio Palestino
Una reflexión crítica sobre cómo la historia se repite y la importancia de la resistencia ante la propaganda sionista.
La lección de la Segunda Guerra Mundial fue principalmente, el respeto a la condición humana no importando su religión, historia, cultura. Pero parece que esto no se aprendió, ni siquiera se meditó. En este punto histórico estamos presenciando el Genocidio del pueblo palestino, pero lo más curioso es que es ejecutado por haber sido las víctimas de los nazis.
Dichas víctimas y sus descendientes, los judíos, propagan hoy en día a través del sionismo una ideología y una propaganda más peligrosa que el propio nazismo.
El sionismo y su fundamento ideológico
El sionismo se sustenta en la supremacía racial a través de la religión, pues sostiene que los judíos son el pueblo elegido de Dios por tanto, tienen el derecho de ocupar Palestina, “el lugar sagrado prometido por Dios”; promueve una enorme victimización, sustentada en discursos desquiciantes que tratan de tergiversar la materialidad de los hechos y cualquier sionista reacciona de manera muy violenta llamando “antisemita” a quien los cuestione; gastan millones de dólares alrededor del mundo para financiar gobiernos, medios de comunicación para sostener su discurso.
La complicidad de los gobiernos occidentales
Es por ello que es enloquecedor ver al gobierno alemán, francés, inglés y norteamericano principalmente apoyando de manera delirante a Israel; mientras los ciudadanos de a pie, vemos el sufrimiento indescriptible de los palestinos.
Hamas: ¿Terrorismo o resistencia legítima?
Entre las propagandas más sonadas de los sionistas es que Hamas es un grupo terrorista, pero si lo pensamos un poco, ¿no será acaso un movimiento de resistencia, un movimiento de liberación?, ¿acaso es no están en su derecho de defenderse? Ha cometido actos violentos, si, eso es innegable, pero pareciera que los palestinos no tienen derecho a decir “basta”. Se les responsabiliza de su tragedia como si ellos lo hubieran provocado cuando se les castiga de manera brutal, para no cuestionar el actuar de los sionistas.
La tergiversación del conflicto
Y se ha tergiversado tanto este tema en el sentido de “argumentar” que es un conflicto de origen bíblico, cuando el sionismo tiene poco más de 100 años de existencia y el estado de Israel se formó por una votación cuestionada en la ONU en 1947; y se dice “que es sin fin” por la cuestión religiosa cuando en realidad si se puede terminar, en el momento en que Israel deje de ser financiado y patrocinado por los países del norte global.
¿Cómo resistir ante la propaganda sionista?
Para mí, en primer lugar, es comprender la historia, empaparse de la verdad de conflicto para también entender las justificaciones absurdas de los sionistas. En segundo lugar, el entendimiento del discurso sionista, observar detenidamente su odio, sus mensajes virulentos y su victimización enfermiza; tercero, manifestar el rechazo al genocidio palestino; cuarto, dejar de apoyar o seguir a actores, cantantantes y famosos que apoyan a Israel; y en definitiva, el boicot a productos que los patrocinan.
Estamos en un momento clave de la historia y considero que la movilización social es crucial para presionar a los gobernantes a cambiar sus políticas con respecto a los sionistas.
Conclusión
La historia nos enseña que el silencio ante la injusticia es complicidad. Como ciudadanos del mundo, tenemos la responsabilidad de informarnos, cuestionar las narrativas dominantes y actuar en consecuencia. El pueblo palestino merece justicia, y nosotros, como humanidad, merecemos aprender de los errores del pasado para no repetirlos.